Una de las reglas lógicas del futbol es que los equipos suelen hacerse fuertes junto a sus aficionados, aunque a veces la presión de jugar en casa es peor que la de visitar a un rival. Sin embargo, parece que a Pumas este año le sienta bien jugar en casa, por lo que esperar un milagro ante New England Revolution no parece algo tan alocado.

Todo aficionado de Pumas sabe que jugar en el Estadio Olímpico Universitario tiene una mística muy particular. Los colores, el Goya y el hecho en sí de estar apoyando al equipo de sus amores hace que jugar en casa sea muy especial. Pero no siempre ha sido fácil. En momentos en los que el equipo no estaba jugando en un buen nivel, la gente decidió mostrar su disconformidad y eso generó tensiones en más de una ocasión.

 

Pero desde que comenzó el año, el saldo en CU es muy positivo. En lo que va del 2022, los del Pedregal jugaron cinco veces en condición de local y solo cayeron en una ocasión: la derrota por 2-1 ante Tigres en la tercera jornada del campeonato. Desde entonces, los Universitarios no volvieron a caer en casa y registran tres victorias y un empate, aunque todavía adeudan el partido ante Mazatlán.

La afición hace más fuerte a Pumas (Imago 7)

La afición hace más fuerte a Pumas (Imago 7)

La buena noticia, y que puede llegar a ilusionar para el duelo de mañana ante New England es que, el único partido que jugaron por Concachampions allí, vencieron a Saprissa por 4-1, resultado que los ayudó a seguir vivos en la competencia. ¿Lograrán hacer historia mañana?

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