Comienza una semana intensa en donde habrá partido cada tres días. Sin tiempo para asimilar el empate ante Juárez FC, Pumas debe ahora corregir los errores y el pobre juego que lo privó de la victoria ante un equipo que jugó con 9 en gran parte del partido. El duelo de mañana ante Monterrey será una prueba de fuego que pondrá a prueba a este plantel.
Facundo Waller aterrizó en la mañana de ayer a la Ciudad de México y se espera que para hoy pase el reconocimiento médico con los felinos y se pueda sumar a los entrenamientos. Además, se espera que desde El Pedregal hagan oficial su contratación que será por un año con una opción de compra.
El mediocampista uruguayo viene a poblar una zona del campo que pareciera desguarnecida: para muchos fanáticos de los universitarios, el medio del campo del equipo está carente un referente que ofrezca una salida limpia del balón y control del partido. Para eso llegó Weller, esperemos a ver si debuta mañana mismo.
Andrés Lillini ha sido respaldado por el vestuario. Si en un principio el técnico interino afirmó que estaba deseoso de volver a las fuerzas básicas, los mismos jugadores del primer equipo -encabezados por Nicolás Freire- lo han convencido de que siga con las riendas de la plantilla y termine en el banquillo por todo lo que resta del Guard1anes 2020.
Esta decisión le cae como “anillo al dedo” a Pumas, quien había sufrido el rechazo de varios candidatos en las últimas semanas. Con Lillini confirmado en el banco, y la llegada del futbolista charrúa, las voces apuestan por un cambio de esquema que pase de los cinco defensores a los cuatro mediocampistas. ¿Será esa la solución?