El Club Universidad Nacional tuvo una temporada de Liga MX muy bipolar: primero fue Subcampeón del torneo Guardianes 2020 y luego ni siquiera logró clasificarse al Repechaje del Guardianes 2021. Lo último hizo mucho ruido dentro del club y la afición, por lo que la directiva se vio obligada a dar la cara ante los malos resultados y prometer una clara mejoría de cara al siguiente semestre.

De a poco, la institución va anunciando a los refuerzos que tratarán de jerarquizar la plantilla Auriazul para el torneo Apertura 2021. Andrés Lillini podrá contar con más variantes y alternativas para armar su equipo ideal, pero hay algo que está muy claro: cuál es la columna vertebral. Y en eso debe apoyarse el DT para pelear por el título.

Todo equipo Campeón tiene una base, una columna vertebral. Es sumamente importante tener un excelente portero, 2 zagueros centrales sólidos, un mediocampo central versátil y un centrodelantero que aparezca en los momentos importantes. Más allá de las incorporaciones que puedan llegar en las próximas semanas, Pumas UNAM ya tiene ocupados estos puestos de manera muy positiva.

Alfredo Talavera ha demostrado que es el mejor portero mexicano; Nicolás Freire y Johan Vásquez forman una dupla central que le da miedo a los rivales; Juan Pablo Vigón y Erik Lira cada vez se entienden mejor en el mediocampo; y lo de Juan Ignacio Dinenno es indescriptible. A partir de ahí, a partir de ellos, Pumas tiene que mejorar para el Apertura 2021.

 

 

Ellos son la columna vertebral del Club Universidad Nacional y Andrés Lillini es consciente de esto. Debe armar un equipo para abastecerlos. Por supuesto que el trabajo de Alan Mozo, por ejemplo, no deja de ser meritorio. Los refuerzos, por su parte, deben mostrar un nivel similar al del lateral derecho y Pumas no tendrá muchos problemas para armar un gran equipo si esto sucede. Este es el camino.