Pumas está en un momento bastante delicado. Su equipo no lo respalda dentro del terreno de juego como sí lo hizo Miguel Mejía Barón, directivo del equipo. Tras la derrota que sufrieron a manos de Santos en el Olímpico Universitario, el técnico argentino se mostró seguro en su puesto, pero aclaró que no es por soberbio o por hacerle daño al club, sino porque considera que puede revertir el momento.
“No se me pasó por la cabeza, tampoco soy un ignorante, un desalmado ni un mercenario. No se me pasó por la cabeza renunciar porque no quiero dejar a este grupo a la deriva, seguramente lo más fácil es decirgracias por todo y poner a mucha gente contenta y que venga otro entrenador. No se me pasó por la cabeza porque soy bastante duro conmigo mismo, pero tampoco alguien que está sujeto a algo, esto no es mi caso, ni por cobrar un contrato ni por nada, llego hace 2 años y medio y tuve que ayudar al club y las cosas salieron relativamente bien y aquí estoy”, mencionó.
Andrés Lillini hizo énfasis y se mostró agradecido con la directiva que le brindó la confianza para seguir al frente del proyecto. Recalcó que en sus planes no está renunciar, sino acabar el torneo y tratar de corregir el rumbo de cara al cierre de torneo.
“Le agradezco al Doctor Mejía Barón y a Leopoldo Silva que ratificaron la confianza en mi para el proyecto, también hay que darle a la afición resultados, al club resultados y eso va cambiando a medida que suceden estas cosas tan negativas. No voy a renunciar para que quede claro de mi parte. Tocaver si en esta semana de jornada doble podemos dar vuelta a esto y salir adelante, sino, paso a paso ver si nos sostienen o nos condenan los resultados. Hoy el resultado es muy malo”, comentó.
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