El Bicampeonato logrado por Pumas en el 2004 ha sido uno de los hitos más recordados por la afición felina. De la mano de Hugo Sánchez, y con un plantel cargado de “veteranos y noveles”, los universitarios se posicionaron como el mejor equipo del fútbol mexicano. Aquella época está enmarcada en las vitrinas más importantes de la historia de la UNAM. Uno de sus protagonistas, Ailton Da Silva, dio una de las claves que los llevaron al éxito continuo, y comparó esa situación con la de la actual plantilla.

"Hugo fue fundamental, pero ese equipo tenía una línea y sabíamos, por ejemplo, nadie podía ganar más de lo que ganaban los 'tops', y cuando esa línea se rompió, ya no se hizo nada", señaló el exjugador brasileño en una entrevista con el programa Fútbol MX by Chile.

Para Da Silva, está “imposición” en el tema de los salarios fue determinante para controlar los egos de aquella plantilla. Sus palabras caen como un ‘jarrón de agua fría’ a los actuales jugadores de Pumas, quienes han entrado en discusiones con la directiva por la reestructuración de sueldos que se pretende para paliar los estragos de la crisis económica que dejó la pandemia.

“Nadie podía ganar más de lo que ganaban los ‘tops’”, repite el brasileño. Entre los dirigidos por Míchel González los jugadores que podrían llevar ese rótulo son principalmente los extranjeros. Nicolás Freire, defensor argentino, sacó pecho hace semanas para ahuyentar los rumores que etiquetaban a los foráneos como peseteros. “Fuimos los primeros en aceptar”, recordó Freire cuando fue cuestionado por el tema de los sueldos. 

Estas declaraciones de uno de los bicampeones podrían servir de ejemplo a la actual camada de Pumas, quienes siguen resistiéndose a llegar a los acuerdos pertinentes aun y cuando la situación “extraordinaria” amerita un esfuerzo entre las partes. “Cuando esa línea se rompió, ya no se hizo nada”, confesó resignado el exvolante, pero en el equipo actual, esa línea parece rota desde hace tiempo.