A casi un mes de su retiro del fútbol, el exjugador de Universidad, Jaime Lozano, dijo que no está contento porque los dirigentes de Pumas no le brindaron la despedida que esperaba. Esta es la entrevista completa del diario Récord: ¿A qué se debió tu adiós a una edad en la que en México el futbolista todavía tiene cuerda?
No fue un aspecto físico, siempre busqué el poderme retirar en una edad en la que estuviera compitiendo. Yo justo lo que no quería pasar era lo del último año: jugar a veces o casi ni concentrar. Mi decisión fue tomada con tranquilidad. Ni aunque viniera Real Madrid me echaría para atrás (risas). ¿Te dolió tu partida de la institución por ser con la que más identificación creaste? Por supuesto que sí. Cada equipo de los que estuve tiene un lugar en mi corazón, pero el dueño es Pumas, era como mi ‘casa’,el que hizo mi sueño realidad de ser profesional. Por eso es que duele todavía más. ¿A qué crees que obedezca que disputaste sólo 37 minutos en la última temporada? Para bien o para mal esto es de gustos. Con Toño (Torres Servín) fue raro porque el torneo antepasado (Apertura 2012) acabé jugando, parecía que contaría con más posibilidades (para el Clausura 2013) y después nada. ¿Encaraste a Torres Servín para conocer sus razones?
No una, sino varios veces. Lamentablemente en Pumas a mí me toco varias veces ir a pedir explicaciones porque en muchas ocasiones no se las daban a uno. Fui a preguntar qué tenía que hacer para estar, tener más minutos; quería escuchar alguna razón firme, algo coherente. Según él me faltaba ritmo. ¿En qué términos saliste con la directiva que comanda Aspe? No puedes salir bien porque son situaciones complicadas, aunque me voy tranquilo, nunca le jugué mal a nadie ni hice algo por mi beneficio pasando por encima de alguien. Si me lo encuentro (a Aspe) lo saludo como si nada, pero grandes amigos no somos. ¿Qué te parecieron estas declaraciones?