Antonio García es un nombre que desde hace par de años dejó de figurar, por muy tristes razones, pero que ahora empieza a sonar fuerte en Pumas pues está pagando las consecuencias de un terrible manejo por parte de la institución con la lesión que terminó costándole la carrera al prometedor canterano.
El ahora jugador retirado está encabezando una demanda contra Pumas contra el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS, por sus siglas en inglés) por todos los gasto que debieron correr por parte de la institución y que dejó a García, ahora en silla de ruedas por las lesiones, en una situación complicada.
Más allá de lo que suceda en este caso, la institución de Universidad Nacional deberá pagar las consecuencias de lo hecho por dos personas que ya no están dentro del equipo. ¿Quiénes son los responsables que García se encuentre en su situación actual y ponen en problemas a Pumas?
El primero de ellos es el expresidente de la institución, Rodrigo Ares de Parga, señalado directamente por el exjugador y el otro señalado es José Remírez, quien es el vicepresidente de operaciones y es quien, según la columna de El Francotirador en Récord, le dijo al jugador que su situación era “mala suerte”.
“Remírez se quedó en el club cuando cepillaron al expresidente para arreglar temas de contratos publicitarios hasta el actual torneo. Pero su labor fue perdiendo fuerza y ya llegó un nuevo directivo a Cantera, el buen Paco de Dios, un personaje de largo recorrido en el mundo del marketing”, añadió El Francotirador.
