Las renovaciones son, normalmente, bastante angustiosas y producen mucha ansiedad pero la realidad es que son necesarias, sobre todo en el caso de Pumas UNAM que necesita una reestructuración total para volver, de a poco, a competir.

¿Y por qué angustiosas? Porque muy probablemente se verán cambios de jugadores y directivos que, ante la mala situación en general del club, vemos como promesas o esperanzas en el equipo, como es el caso de Carlos González que según los rumores no quiere seguir en el equipo.

Así mismo, Alan Mozo y Andrés Iniestra podrían irse también, que son canteranos y muy queridos por la afición puma; pero esto podría ser solo parte de esa renovación necesaria en el equipo.

Así mismo, jugadores que no han rendido en su totalidad como Martín Rodríguez, Martín Barragán, Victor Ignacio Malcorra; entre otros, podrín salir del equipo en búsqueda de dinero para concretar este recambio.

A nivel dirigencial muy probablemente veremos cabezas rodar y conozcamos a nuevas personas que pueden ser mejores o hasta peores que la dirigencia anterior, pero todo esto es parte del riesgo que es dar un paso hacia adelante en una reestructuración completa que, muy seguramente, llegará al Club Universidad Nacional.