Una verdad cruel y dolorosa. El delantero argentino Ismael Sosa recordó en una conversación por Instagram Live con el diario Récord, que su salida del Club Universidad Nacional se provocó por una decisión directa del entonces presidente del Patronato, Rodrigo Ares de Parga.

El hecho ocurrió en 2016, cuando fue vendido por ocho millones de dólares a los Tigres, y según el atacante, las formas que utilizó el directivo para correrlo de Pumas no fueron las adecuadas.

"Ya había dicho que no era la manera, no era como yo lo esperaba, porque no hubo comunicación, pero después con el tiempo se me fue pasando, además llegue a Tigres que fue un buen equipo", señaló el Chuco.

En esa línea, agregó que "al principio obvio que me dolió porque en ese momento yo era el referente del equipo y la gente me quería mucho, y estaba cómodo en el club y entiendo que el club tenía necesidades, pero hay formas de manejar una negociación o una transferencia y de momento no me gustó cómo se dio. Fueron casi 10 millones de dólares y en ese momento el club no tenía las finanzas sanas, pero no fue la manera de comunicarlo".