A medida que corren las semanas sin actividad, se van percibiendo con mayor claridad los estragos que está ocasionando el coronavirus en la estabilidad de los equipos. Sin partidos y sin ingresos de ningún tipo, las estructuras de los distintos clubes tambalean y mucho están pendiendo de un hilo. El caso de Pumas está siendo alarmante, a los recientes problemas de unos de sus patrocinantes, se suman ahora las pérdidas que tiene por no disputar sus encuentros como locales.
Según reseña el diario Marca, la UNAM está llegando apérdidas de hasta 35 millones de pesos durante esta pandemia por concepto de boletos vendidos en los partidos. Para los felinos en el Clausura 2020 el promedio de fanáticos en sus encuentros fue de 26,448 aficionados en los cinco partidos que disputó en la Ciudad Universitaria.
Después de la pausa del torneo Clausura 2020 al término de la jornada 10, a los dirigidos por Míchel González les falta por disputar como local los partidos ante Tijuana, Puebla, Chivas y Querétaro, rivales a los que podrán enfrentar en caso de que se reanude el torneo, con la salvedad de que su disputa se aventura sin aficionados en el recinto universitario.
Desde ayer se coló la noticia de que Interjet, empresa encargada de programar y realizar los viajes de la UNAM en sus duelos como visitante, podría estar en serios problemas administrativos y económicos por el parate de la actividad aérea en todo México, por lo que se aventura una merma en los contratos que tiene acordados con Pumas.
Este inconveniente, sumado a la pérdida de los 35 millones de pesos, dejarán al equipo de la UNAM en una situación desfavorable de cara a la reanudación del torneo, por lo que el equipo ha sido muy cauto a la hora de hablar de posibles refuerzos ante una economía que se ha visto lastrada y diezmada sin posible solución en un margen corto de tiempo.