No fue la tarde de Pumas en San Luis. Muy temprano en el encuentro les marcaron un penalti en contra por una mano de Santiago Trigos y Bertarame no perdonó. Luego, cuando mejor jugaban en la segunda mitad, un cabezazo los sentenció con el marcador final, 2-0. Con este resultado, los auriazules pospusieron su clasificación a la siguiente fase y tendrán que sumar sí o sí ante Chivas el próximo sábado en el estadio Akron.

El partido inició con la posesión para los auriazules. Aunque no es el sello característico de los equipos de Andrés Lillini, los locales renunciaron al balón para tratar de sorprender con latigazos a la zaga felina. Sobre todo trataron de aprovechar la banda de Pablo Bennevendo, quien salió al campo para darle descanso a Alan Mozo. 

La polémica se hizo presente en el Alfonso Lastras cuando el silbante no observó un posible penalti a favor de los tuneros. Tuvo que intervenir el VAR para poder decretar el tiro desde los once pasos por una mano de Trigos, el canterano que ya provocó dos penales en este certamen. El goleador Berterame no perdonó y tuvieron que remar los capitalinos contra corriente. 

La llave para el peligro por parte de los pupilos de Andrés Lillini fue Sebastián Saucedo, elemento que intentó marcar diferencia desde la banda izquierda, pero los delanteros no lograron aprovechar ninguna de las oportunidades que les generó. La más clara llegó gracias a un tiro de larga distancia por parte de Favio Álvarez, pero Barovero estuvo atento en el fondo y extinguió el peligro. 

Ya en la parte complementaria, Lillini movió sus piezas en busca de puntos que le ayuden en la lucha por la clasificación. Le dio juego a Leonel López, Alan Mozo y José Rogério. Sin embargo, volvieron a tocar la puerta gracias a un tiro lejano por parte de Saucedo que Barovero mandó a tiro de esquina. Todo no fue suficiente y los potosinos ampliaron la ventaja a balón parado. 

Luego de una jugada donde González no se quedó con el balón, el mismo terminó en el fondo luego de un remate de Luis León. La anotación cayó como un balde de agua fría en los capitalinos que no mostraron señales de vida ni su mejor funcionamiento. No hubo tiempo para más. No fue el mejor partido de Pumas y tendrán que definir su clasificación ante las Chivas el siguiente sábado.