El mercado de pases está cada vez más cerca y los clubes empiezan a hacer el análisis de lo que dejó la temporada. En este caso, tanto Miguel Mejía Barón como Andrés Lillini deberán sentarse a charlar sobre la plantilla y decidir quiénes merecen una nueva oportunidad y quiénes deberán despedirse de Pumas. Para ello, tendrán que revisar los números y hay varios que pueden salir perjudicados.

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Las actuaciones de más de un jugador auriazul han dejado muy enojados a los aficionados. Hace un par de días, en Dale Azul y Oro se mencionó la molestia que generaban los rendimientos de varios extranjeros, y esa situación es seguida de cerca por todos los universitarios, pues de este mercado dependerá un poco el rendimiento en la segunda mitad de la temporada.

En las últimas horas, se presentó un nuevo parte médico que justamente tiene a dos de los apuntados: Favio Álvarez y Cristian Battochio. Los dos argentinos son bastante resistidos por la afición, pues su aporte ha sido mínimo, particularmente Battochio, que aportó solo una asistencia en 15 partidos jugados. La historia de Álvarez es distinta, porque jugó 13 partidos, sufrió algunas lesiones y consiguió anotar dos goles, además de aportar una asistencia. Pese a eso, algunas de sus actitudes hacia los fanáticos no cayeron bien.

Con sus números, son dos de los extranjeros que menos aportaron, al igual que Rogerio, que hizo un solo gol en los 10 partidos de los que participó. Si la intención de Lillini y Mejía Barón es seguir dándole minutos a los canteranos, estos futbolistas podrían dejar de formar parte del plantel para abrirle la puerta a algún futbolista joven. El otro jugador que podría ingresar en este listado es Diogo que, aunque marcó dos goles importantes, ha tenido una muy mala efectividad de cara a la portería rival.

Aunque mucho tiene que ver con la sensación de los fanáticos, los números no mienten y, en caso de recibir una buena oferta, no habría motivo para mantener a estos futbolistas dentro del club. Por el momento, es todo incierto, por lo que lo único que queda es esperar los movimientos del mercado para poder ilusionarse o no con el próximo campeonato.