Pumas ha sabido sobreponerse a la adversidad en este inicio de Guard1anes 2020. A la renuncia de Míchel González, se sumaba el pésimo rendimiento que mostró el equipo en la Copa por México; pero ahora, tres semanas después, el equipo comparte el liderato del torneo y acaba de arribar a Ciudad de México su nuevo refuerzo: Facundo Waller.

La llegada del mediocampista uruguayo genera muchas interrogantes que podrían ser respondidas en el transcurso de las próximas semanas. Y es que a pesar de las victorias ante el Querétaro y el Atlas, la imagen que se dio en el empate ante Juárez FC dejó un mar de dudas en el equipo que dirige Andrés Lillini.

Con más de 48 minutos con dos hombres de más en el partido, los felinos se vieron impedidos de dominar y a punto estuvieron de perder en lo que al final resultó un pobre empate a uno. Este marcador, sumado a las ajustadas victorias en las primeras jornadas, han hecho que el cuestionamiento principal apunte hacia el esquema que utiliza el sustituto de Míchel: una línea de cinco defensores que deja poco margen para la creación.

Con la llegada de Facundo Waller, mediocampista excelso y de buen pie, el dibujo táctico de Lillini podría variar para darle ingreso en el once al futbolista charrúa. Si bien la zona del medio está cubierta por Andrés Iniestra y Juan Pablo Vigón, Waller podría ser un complemento perfecto para este tándem que haría ganar dinámica y juego a un equipo que carece de ideas en la zona de creación.

Si se utiliza al capitán Sub-23 de Uruguay, junto con los dos mencionados arriba, más Favio Álvarez en una zona más adelantada, y los archi conocidos en ataque Juan Dinenno y Carlos González, el sacrificado tendría que venir en la zona de la retaguardia, y en especial alguno de los dos laterales-extremos, que han sido una regular en lo que va de torneo. El próximo encuentro será este miércoles ante Monterrey, y pudiera ser el primer ensayo de un nuevo Pumas con más juego elaborado, y menos futbolistas a los costados.