El mal resultado en la ida de la semifinal no debe haber dejado tranquilo a ninguno de lo integrantes de Pumas que participaron de aquel encuentro. Sin embargo, siempre que se revisa la historia hay estadísticas que traen grandes recuerdos y, justamente en este escenario que parece adverso es cuando mejor reacciona el conjunto de Andrés Lillini

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La derrota en el Estadio Olímpico Universitario dejó un sabor amargo entre los aficionados universitarios, que no pudieron festejar una victoria en casa y ahora, como ya ha ocurrido en otras ocasiones y como le pasó con América, deberá ir a buscar la victoria en el Estadio Jalisco. El recuerdo nostálgico con el que se relaciona este dato que puede animar a los universitarios tiene que ver con un duelo con Cruz Azul.

Es que, la última vez que los de Lillini habían perdido en el partido de ida de la semifinal de la Liguilla fue en el 2020, cuando cayó 4-0 con la Máquina en aquel partido para el olvido. Sin embargo, y aunque la goleada quedó tatuada en el inconsciente colectivo, lo que no se olvida es como los universitarios consiguieron remontar la serie con el 4-0 en casa para luego pasar a la final.

El hecho de tener esa serie como demostración que nada está perdido es la mejor motivación que pueden tener los jugadores auriazules, aunque hay otra coincidencia. Es que, en aquella ocasión, el finalista de la otra llave también fue Club León, por lo que los del Pedregal irán en busca de la victoria para buscar revancha en la final del torneo.

Aquella victoria ante Cruz Azul no será lo único que motive a los Pumas, pues buscarán mantener la racha positiva que tienen en el Estadio Jalisco ante los Zorros, que tienen dos derrotas consecutivas en casa. Es que, después de 13 partidos sin perder en casa, los universitarios ganaron dos veces y buscarán hacerlo una vez más esta noche para hacer historia.