Así como se preguntó aquel viajero esperanzado que encontró un quebrada insuperable: "¿hasta aquí nos trajo el río?", Pumas empezó a sacar cuentas tras caer goleado ante Cruz Azul en el partido de ida de la semifinal para que el cauce de su camino en este Guard1anes no llegue a su punto final.

El 4-0 encajado en el Estadio Azteca parece una ventaja abultada difícil de superar. Sin embargo, hay un precedente lejano que podría llenar de esperanzas a la fanaticada de los universitarios. Fue un 22 de diciembre de 1989 en la jornada 18 de la 1989-90 en el Coloso de Santa Úrsula la única vez que la UNAM le pudo convertir cuatro anotaciones a los cementeros.

Y es justamente este resultado el que le vale a los dirigidos por Andrés Lillini si aún sueñan con llegar a la final. Con un 4-0 el próximo domingo en Ciudad Universitaria, los auriazules pasarían de ronda aún con la serie igualada 4-4. El criterio de desempate les favorece tras culminar en una mejor posición que su rival en la ronda regular.

De marcar Cruz Azul, los felinos si estarían obligados a marcar 5 anotaciones. A diferencia del caso anterior, en este si cuentan los goles anotados de visitantes como una norma de desempate.

El duelo de vuelta será este domingo 6 de diciembre a las 18:00 (hora local) en el Estadio Olímpico de la Ciudad Universitaria, y en donde Pumas intentará usar su 'última bala' para intentar una épica y lograr el pase a la final.