Varios clubes chilenos no quisieron contar con el ahora extremo izquierdo de la UNAM en su etapa formativa, debido a su complexión física.
Martín Rodríguez goza de un buen presente en Pumas, el equipo está puntero y el ya suma dos goles, esto después de un irregular paso en Cruz Azul, pero de un pasado aún más complejo en su etapa de adolescente, cuando fue rechazado por varios uno de ellos, la Universidad de Chile por su físico.
+”Pumas está arriba, pero lo difícil va a ser mantenerse”: Alfredo Saldívar.
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“En la U me dijeron que era muy chico, muy flaco y que tenía que volver después, más adelante. Pero al final decidí no volver, me quedé jugando en el norte”, aseguró Rodríguez en una entrevista a La Tercera de Chile el año 2015. Sin embargo, Huachipato si apostó por él y decidió incorporarlo a sus fuerzas básicas, así lo reveló Carlos Pedemonte, uno de los destacados formadores en Chile, que en aquel momento trabajaba para Los Acereros.
“Él tenía un físico muy pequeño para su edad cronológica, muy delgado y había pasado por pruebas en clubes donde no quedó, pero nosotros apostamos a su calidad técnica, porque consideramos que era un niño que los niveles de desarrollo técnico eran mejores que la media que nosotros teníamos en el club. “, dijo en entrevista con Record.
“Pumas trabaja en silencio, en no generar muchos conflictos”: Alfredo Saldívar.
Pedemonte reveló como fue su adaptación desde Diego de Almagro a Talcahuano, desde el norte de Chile al sur: “Él tuvo que venirse desde los 14 años de su localidad que queda distante de la Ciudad de Talcahuano. Lo tuvimos en una pensión y se fue acostumbrando a la nueva vida, porque vivía en pleno desierto de Atacama, con un clima seco, no lluvioso y llegó a una zona mucho más húmeda, entonces fue pasando etapas y poco a poco fue mejorando su rendimiento”.
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Además describió la personalidad de Rodríguez: “Era introvertido. Siempre fue un chico muy abierto a recibir información, dócil en la ejecución de su desarrollo y nunca fue rebelde, más bien lo era dentro de la cancha, porque él solía improvisar mucho y hacía cosas muy diferentes, pero nunca estuvo cerca de las circunstancias del ego, el sentirse más que los demás”.