Tres años exactamente han transcurrido desde que Rodrigo Ares de Parga se hizo presidente de Pumas UNAM. Un balance con puntos altos, muchos bajos y un exceso de polémicas para el equipo.

 

Sin embargo, también arrancan los meses claves para que el directivo aspire a la reelección luego que finalicen los cuatro años que debe durar un mandato, pero algunas cosas deben cambiar radicalmente para que esto resulte algo satisfactorio.

 

La apuesta es clara para esta temporada que arranca con el Torneo Apertura 2019 luego de un Clausura desastroso con la llegada de Jesús Ramírez a la dirección deportiva y de Michel como entrenador.

Sin embargo, la gran deuda de Ares de Parga con Pumas ha sido la confección del equipo con fichajes que no llenaron las expectativas y además de polémicas salidas como las de Ismael Sosa, Darío Verón y Nicolás Castillo.