A partir de ahora solo vale rezar. Pumas UNAM ha complicado -aún más- sus opciones de seguir soñando con entrar en puestos de clasificación tras igualar con Chivas de Guadalajara en un partido en el que Andrés Gudiño fue la figura. El portero rojiblanco ahogó el grito de gol de los universitarios en más de una ocasión y sostuvo el 0 en la jornada 8 del Apertura 2021 de la Liga MX.
Pumas saltaba al césped de Ciudad Universitaria con la obligación de ganar. Apenas iniciado el encuentro, se notó ese ímpetu que nace de la necesidad de puntuar. Saucedo avisó recién al minuto 1' del encuentro pero se topó con un Gudiño que se hará figura con el correr de los minutos.
El duelo se mostró trabado por momentos y reflejó la realidad de ambos conjuntos: dos oncenas sin casi ideas y apostando por un error del rival o por alguna genialidad casual. Por el bando universitario todas las apuestas señalaban a Saucedo, el más incisivo a lo largo de todo el choque.
Favio Álvarez también la tuvo al 39' y al 44', pero Gudiño volvió a ser protagonista y sacó ambos disparos. Julio González en cambio, fue un testigo VIP en toda la primera parte. Los primeros 45' estuvieron muy lejos de lo mejor de los duelos que han protagonizado universitarios y rojiblancos en la historia de la Liga MX.
Segunda parte
La segundo mitad empezó con la misma tónica de la primera: lucha en el medio del campo y pocos espacios para crear juego. Lillini apostó por los cambios pero ninguno marcó la diferencia, y se echó en falta la presencia de una referencia de área que siempre corre por cuenta de Juan Ignacio Dinenno.
A pesar de que el resultado no dejó contento a ninguno de los bandos, desde Pumas pueden sacar varias conclusiones positivas pensando en lo que se viene: la primera apunta hacia Pablo Bennevento, quien podría ejercer de lateral derecho sin problemas ante las constantes indisciplinas de Alan Mozo.
Las opciones más claras llegarían en el ocaso del encuentro. González pasó de ser el villano al héroe cuando después de un error en la salida, detuvo el disparo que derivó de su error y así evitó la apertura del marcador. Seis minuetos después, al 82', Corozo lo tuvo en sus pies pero Gudiño volvió a robar el grito de gol.
A solo tres del final hubo otra jugada de claro peligro en la que Cisneros desperdició un mano a mano con el portero de Pumas tras trastabillar en los metros finales. Así se fue terminando el choque en un empate que no deja contento a ninguno, y que acentúa la crisis que se vive en el Pedregal y por los lados del Akron.
