A la fase regular del Torneo Guard1anes 2020 le quedan dos jornadas que para Pumas pueden significar mucho en su futuro en la competición pues en este par de compromisos podrá definir si entrar de manera directa a la liguilla o si debe ir por el largo camino del repechaje, algo que quiere evitar a toda costa.
Los dos encuentros que le restan a Pumas son, en el papel, de dificultad por tratarse de equipos que aún están luchando de lleno por sus diferentes aspiraciones: primero será ante Chivas de Guadalajara y luego ante Cruz Azul, con el margen de error mínimo ante la posibilidad de salir de los cuatro primeros puestos.
Pero más allá de medirse por los seis puntos que lo dejen dentro de los cuartos de final de manera directa, ambos rivales significan para Universidad Nacional la oportunidad de mostrarse como un firme candidato al título al tratarse de dos rivales que tienen plantel suficiente para pelear por el campeonato.
Y más allá de eso es el hecho de llegar bien encaminado a la fase decisiva y salir de la pequeña irregularidad en la que se cayó tras perder el invicto con León en la que se sumaron tres empates y tan solo una victoria.
Pumas tiene que demostrar con una dosis de mejor juego lo que se ve en la tabla de posición, en la que nunca ha salido de los primeros lugares pero con la opción de dar el golpe de autoridad que necesitan los dirigidos por Andrés Lillini.
