Luis García Postigo es, sin duda, uno de los jugadores con mejor rendimiento en su carrera profesional que ha salido de la cantera de Pumas UNAM y fue a principio de la década de los 90 que se empezó a notar como el gran goleador que lo llevó a ser uno de los referentes del futbol mexicano.
Fue, por dos temporadas seguidas, el campeón de goleo de la competición y hoy se cumplen 28 años desde que ese 9 de mayo de 1992 amarrara su segundo título como máximo artillero de la competición. Fueron 26 en la 1990-91 y luego 24 en la 91-92, siendo además campeón en la primera de estas.
En una entrevista con Diario Récord habló de esa gran hazaña. "Era yo muy joven y estaba rodeado de un grandísimo grupo de profesionales tanto desde la presidencia del club del ingeniero Aguilar Álvarez (QEPD), el mejor directivo de la historia del futbol mexicano por mucho, Miguel Mejía Barón. Yo estaba muy bien rodeado y estaba muy bien orientado en esos títulos de goleo porque era yo muy chavo", afirmó.
"En la primera temporada se armó un trabuco fuimos el mejor equipo en todas las categorías, Fue un equipo sumamente poderoso y fue un trabajo en equipo. Ya en la segunda llegó Tuca y hubo cambios de jugadores, yo ya un poco más maduro y seguí metiendo goles con un equipo mucho más juvenil", añadió.
Pese a su capacidad para marcar desde que comenzó a jugar con Pumas, García nunca tuvo como meta ser campeón de goleo. "Nunca estuvo en mis objetivos, pero era delantero y un delantero siempre es juzgado a través del número de goles, pero nunca fue una obsesión y se fue dando por que era yo muy joven y no entendía muchas cosas de lo que estaba pasando a mi alrededor porque el equipo ganaba y yo metía goles y goles, y así fue el primer año y el segundo también", dijo.
