El ambiente relacionado con Pumas UNAM, se muestra preocupado por el andar a los tropezones del equipo que conduce Andrés Lillini, no solo en el Torneo Grita México Apertura 2021 de la Liga MX, sino en todo el año en general, dado que el recuerdo de la mala campaña en el Guard1anes Clausura que lo dejó al Auriazul sin Liguilla, se encuentra latente. No obstante, Mario Trejo, cree que la explicación del mal momento no se encuentra en la superficie y apartó al estratega del foco como principal culpable.
"Yo creo que para los clubes es el argumento más simple el de correr al técnico. Traer a otro y listo. Pero no creo que ahora sea lo de Andrés Lillini", opinó el exdirectivo del Club Universidad Nacional. Sin embargo, aclaró que si internamente la conducción está convencida que el timonel es el problema, deberían accionar: "Salvo que se den cuenta de que no esté tomando las decisiones adecuadas y que ya tengan a alguien, porque siempre hay, que pueda brindar mejor perspectiva".
Además, Mario Trejo, en la plática que mantuvo con MARCA Claro México, le apuntó claramente a la actual dirigencia de Pumas: "Vemos que se manejan de una manera diferente. Se alejan un tanto de los propósitos tanto de la UNAM como de los del club, que le han dado resultados en su momento. Nos impacta de una manera triste y hasta con un tanto de molestia porque siempre queremos ver al club que tanto queremos en los primeros puestos".
En esa línea e insistiendo que Andrés Lillini no es el máximo responsable, expresó: "En la situación de Pumas hay cosas mucho más profundas. Deben tener a la gente adecuada en los puestos indicados. Pero se me ocurre que ahora como las cosas no están claras, hay que reunirse y tratar de salir de la situación juntos, tirando todos para adelante. A los culpables hay que identificarlos e invitarlos a que se retiren al final del torneo".
Para cerrar, reflexionó: "Años atrás el presupuesto del Club Universidad Nacional ha distado mucho de ser de los mejores del futbol mexicano, porque su fuerte siempre fueron los jugadores surgidos de las Fuerzas Básicas complementados por cuatro o cinco jugadores extranjeros que no eran estrellas, pero que cubrían el molde que se necesitaba con características deportivas, así como también humanas para formar grupos de competencia en la cancha, con gente armonizada y con valores. Hoy pareciera que han tomado otro rumbo".
