Que la actualidad de Pumas UNAM es mala, es indiscutible. Pero lo que también es cierto es que hubo fallos arbitrales que perjudicaron al equipo de Andrés Lillini que, de no haberse sancionado, hoy la posición en la tabla sería un tanto más cómoda.

Por un lado se encuentra el recuerdo latente de Luis Enrique Santander Aguirre, el juez del partido de Pumas vs. Toluca por la jornada seis del Torneo Guard1anes Clausura de la Liga MX 2021.

Aquella tarde en la Bombonera, Juan Pablo Vigón que quedó solo frente a la portería rival, remató cruzado al fondo de la red y provocó lo que por un momento fue el 1 a 0 de Pumas. Pero el árbitro recibió un llamado de atención del VAR y, finalmente, marcó un dudoso offside del delantero canterano Emanuel Montejano. Respecto a la jugada, el exárbitro Armando Archundia, declaró horas más tarde que, para él, el gol era válido.

Y por el otro, la situación que aún se mantiene fresca, en la que César Ramos Palazuelos también por intervención del VAR, cobró una imperceptible mano de Johan Vásquez en el área defendida por Alfredo Talavera, en el ocaso del encuentro frente a Cruz Azul.

En relación con la polémica, otra voz autorizada como Edgardo Codesal, cuestionó públicamente en su cuenta de Twitter la decisión del colegiado en el Estadio Olímpico Universitario.

Por lo tanto, Pumas tranquilamente podría tener, como mínimo, dos puntos más, lo que le daría una bocanada de oxígeno a Andrés Lillini y mayores posibilidades al Club Universidad Nacional para cumplir con el objetivo de clasificar al repechaje.