En una entrevista recién llegado a España, el jugador de la Real Sociedad rememoró con mucho orgullo sus años como Puma.
Héctor Moreno lleva más de 10 años jugando en el fútbol europeo, pero sus orígenes futbolísticos son felinos. El sinaloense llegó a los 15 años a las fuerzas básicas de Pumas y alcanzó a jugar por 5 temporadas en el club universitario: tres en fuerzas básicas y dos en el primer equipo, desde donde dio el gran salto al viejo continente.
Moreno reveló que Pumas no fue el primer equipo al que postuló. “Antes de llegar a Pumas, estuve seis meses en el Atlas de Guadalajara con 14 años. Al término de ese tiempo me dijeron que no valía para el fútbol y me volví a casa. Y como me habían dicho que no servía para el fútbol, me lo creí”, confidenció.
De todos modos, le agradeció a su madre el haberse convertido en futbolista profesional. “Mi madre vio que hacían una prueba de una semana en los Pumas y como es muy aficionada, me obligó a presentarme. Yo no quería volver a salir de casa. Fui por complacerla y con el billete de vuelta. Como no quería quedarme debí hacer las pruebas tan relajado que las cosas me salieron increíble. Me ficharon y pasé cinco años allí, dos en el primer equipo. Salí futbolista gracias a ella”, contó Moreno.
Moreno fue figura de la selección mexicana que salió campeona del Mundial Sub 17 de Perú, en 2005, y a la vuelta del torneo continental debutó en el primer equipo de Pumas. “El Mundial me cambió la vida porque tres meses después ya estaba jugando en Primera con los Pumas. Aquel Mundial me aceleró mucho el proceso. A la semana de volver de Perú, Hugo Sánchez, que era el técnico del primer equipo, me subió con los mayores. Imagínate, una persona con su palmarés que te da toda su confianza. Vivía en un sueño”, finalizó.