Sergio Egea es recordado con cierto recelo por parte de la afición de Pumas. El que fuera asistente técnico de Hugo Sánchez cuando dirigía a los felinos fue acusado por el propio sobrino del estratega de cobrar a los futbolistas para que estos tuvieran cabida en el equipo. Esta acusación es desmentida por el sudamericano, que se defiende alegando el virtuosismo de los integrantes de aquel plantel.

Fue una venganza del sobrino de Hugo (Horacio Sánchez), quien no tenía nivel para jugar en la Primera División de Pumas. Mi respuesta es Sergio Bernal, Joaquín Beltrán, Darío Verón, Jaime Lozano, Leandro y Bruno Marioni. Me gustaría que los periodistas se dirigieran a ellos y les preguntaran si pagaban por jugar. Todos los rumores se caerían porque jugaban los que realmente lo merecían, comentó Egea para ESPN.

Tras dirigir a varios equipos en España como el Real Oviedo y el Almería, Sergio Egea volvió a México para ser vicepresidente deportivo, director técnico y coordinador de fuerzas básicas de la UNAM en el periodo del 2017/18.

Durante esos años la polémica lo persiguió y se vio envuelto en otro escándalo: según información que se filtró, el argentino fue el encargado de “jubilar” a los hermanos Antonio y Alejandro Palacios.

Eran ciclos que se habían cumplido porque ya tenían 36 y 37 años y Pumas es un equipo formador. En la cantera estaba Alfredo Saldívar y entendíamos que había que renovarse. No había nada en contra de los Palacios, ellos salieron campeones conmigo”, se defendió.

Pese a toda la polvareda que se generó en torno a el, Egea recuerda con gran estima y cariño a la institución que le abrió las puertas. “Yo llegué en 2001 y me dio mucho, es una institución con muchos valores; pertenece a la Universidad y hay que tener un gran comportamiento. Pumas fue muy importante en mi carrera deportiva, tanto como profesional y como persona, finalizó.