Pumas navega en aguas turbulentas y la jauría fiel ante todo mal momento, empieza la ‘Cacería de Brujas’ para buscar los responsables de la delicada situación. Alfredo Saldívar ha sido el primer señalado por sus errores directos que se han visto reflejados en los resultados de los partidos, pero ahora los focos podrían señalar al banquillo: el entrenador Michel no ha podido dar con la tecla del equipo y los felinos se han resentido y cosechan cuatro jornadas sin ganar.

En un recuento del Clausura 2020 de la Liga MX, dista mucho el inicio avasallante de Pumas con este presente agónico: el equipo universitario comandó la tabla general por varias semanas, y un hecho revelador apunta hacia la oncena titular como posible responsable de la racha: desde la jornada 1 a la 4 jugaron los mismos intérpretes, y en ese periodo se cosecharon dos victorias y dos empates.

Pero al llegar la quinta jornada empezaron los cambios con la inclusión de Marco García en el once en detrimento de Juan Pablo Vigón, y a pesar de que el ajuste funcionó dos fechas, llegó la primera derrota ante Morelia. Ya en la jornada 8 el equipo se descompuso y ha desembocado en lo que es Pumas hoy: el equipo más goleado y con un punto de los últimos 12 disputados.

En la jornada 8 los de Michel fueron goleados por Tigres (3-0), en este duelo Vigón hacía su ingreso de nuevo al once por Andrés Iniestra, indispuesto. En el empate con el América en la jornada 9 se evidenciaron más los cambios, forzados o no, que realizó el entrenador español. Luis Quintana salía al estar suspendido y lo sustituía Nicolás Freire; Sebastián Saucedo también salía de la oncena titular y hacía su ingreso Victor Malcorra.

Ya en la última jornada, en el descalabro ante León (1-3), Luis Quintana regresaba al inicio con los titulares y en la medular aparecía Leonel López, asiduo recambio a lo largo del torneo. Ante todos estos cambios con resultados cuestionables, surge la interrogante: ¿Qué tanta culpa ha tenido Michel en el devenir irregular del equipo?