Después de dos partidos en condición de local en los que muy pocas personas habían asistido al Estadio Olímpico Universitario, ayer los aficionados de Pumas se hicieron sentir durante y después de un histórico triunfo. Luego del silbatazo final, los fanáticos siguieron la fiesta, pero los jugadores optaron por saludar y retirarse del campo de juego, algo que llamó la atención.

Ayer por la noche, la alegría era palpable en las gradas del estadio universitario. La gente gritaba eufórica, se abrazaba con desconocidos y, después de 17 jornadas de más sufrimiento que goce, ayer podían respirar tranquilos por un rato. Obviamente los presentes en las gradas no eran los únicos que celebraban, sino que los futbolistas también lo hicieron después de vencer a Cruz Azul.

Sin embargo, contrario a lo que se pensaba, los festejos entre público y jugadores se dieron por separado: los jugadores celebraron en la cancha entre sí, saludaron a los presentes en el estadio, y se retiraron hacia los vestidores sin cantar el Goya con la gente, sin interactuar con ellos. La precipitada salida de los futbolistas tendrá que ver quizás con lo que se viene hablando hace semanas: Pumas todavía no tiene nada asegurado.

La euforia de los jugadores y el cuerpo técnico se notaba (Imago 7)

La euforia de los jugadores y el cuerpo técnico se notaba (Imago 7)

Aunque sin lugar a dudas la clasificación al repechaje es algo para festejar, las cosas no terminan aquí, pues ahora habrá que enfocarse en el duelo ante Toluca que, definirá si llegan a jugar los cuartos de final de la Liguilla después de un año sin competencia después de la fase regular. Pese a que los jugadores se retiraron, los casi 24 mil fanáticos aprovecharon para cantar y sacarse todo el nerviosismo de encima para empezar la semana con el pie derecho.

Mejora notable en el aforo

Después de tres partidos en los que nunca se llegaron a superar las 15 mil personas presentes,  ayer los fanáticos de Pumas superaron con tranquilidad los 20 mil fanáticos y el ambiente se sintió distinto. De hecho, el impulso ánimico de los aficionados ha ayudado en esta racha de victorias sobre el cierre de la fase regular y sin dudas también ayudó a que ayer ganaran.