El balón volverá a rodar en la Liga MX tras 130 días de estar suspendido producto de la pandemia del coronavirus que paralizó al mundo. El parón derivó en una crisis económica en todas las industrias y el futbol no estuvo exento. Por eso, los clubes buscan reducir su carga salarial y negocian con sus jugadores para lograrlo. En ese tire y afloje se encuentra en este momento Pumas, que aún no llegó a un acuerdo con su plantel.
Según informó Mediotiempo, hay malestar en el seno de la plantilla porque consideran que el recorte propuesto por la directiva es demasiado grande. Es más, algunos elementos están dispuestos a abandonar la institución si la posición de los altos mandos del club no cambia.
También consideran acudir a la AMFpro (Asociación Mexicana de Futbolistas Profesionales) para hacer respetar sus derechos laborales. Uno de los aspectos que más traba la negociación es la diferencia entre los sueldos de los canteranos y los extranjeros, siendo los de los jóvenes muy por debajo de lo esperado.
El proceso de reducción comenzó en junio con la partida de algunos de los contratos más caros con los que contaba Pumas: Víctor Malcorra, Pablo Barrera, Alfredo Saldívar y David Cabrera. Sin embargo, el presidente Leopoldo Silva necesita recortar aún más.
Uno de los futbollistas que se expresó al respecto fue Nicolás Freire, quien reconoció las direncias en las tratativas, pero aclaró que todos los extranjeros de Pumas estuvieron de acuerdo en aceptar las condiciones porque hubiera sido "irrazonable decir que no".
