Se los estamos advirtiendo de antemano, para no generar falsas expectativas. Lo que viene a partir del próximo domingo 31 será un camino muy duro para Pumas UNAM, si es que quiere perseverar en su objetivo de clasificar a la Liguilla.
Con 11 partidos disputados (sumando dos victorias, cuatro empates y cinco derrotas) y apenas 10 puntos acumulados, tendrá que sumar, al menos 15 unidades para poder meterse en la postemporada; de lo contrario, verá la Fiesta Grande por televisión.
Bajo este escenario, el equipo de Bruno Marioni está obligado a ganar todos sus partidos como local, ante Chivas, Xolos de Tijuana y Toluca, y posteriormente deberá rescatar unidades en sus visitas a Monterrey (ante Tigres), el Estadio Azteca (con Cruz Azul) y Torreón (frente a Santos).
Para hacerlo más sencillo, si Pumas no gana a Chivas ni Tigres, no calificará a la postemporada, en lo que suena como un nuevo fracaso para la administración de Rodrigo Ares de Parga.
