Pase lo que pase, en Pumas hay dos nombres que se salvan hasta en el momento más bajos. Son Alan Mozo y Carlos González, quienes salvan los papeles en el equipo en cualquier circunstancia.

Los dos jugadores brillan, inclusive, cuando el equipo da presentaciones de bajo nivel tal y como sucedió este domingo en la visita a Lobos BUAP, que se impuso 2-1 a pesar de estar con un hombre menos en todo el segundo tiempo.

Del talento de ambos nació el único tanto de los universitarios en Puebla. El lateral derecho buscó insistentemente un espacio que generó un tiro de esquina, el cual aprovechó el delantero con un sólido cabezazo.

Sigue siendo la dupla que más brilla en Pumas y quizá el mayor rayo de esperanza que tienen los de Bruno Marioni para pensar que se puede mejorar y una muestra de la garra que significa usar la playera de Universidad Nacional.