El final del sueño llegó para Pumas de la manera más abrupta que se pueda imaginar: una goleada escandalosa frente al rival más acérrimo, América, que no tuvo absoluta piedad con un contundente 6-1 en el Estadio Azteca.

Sin embargo, en el andar de este Torneo Apertura hay cosas por rescatar de cara al futuro inmediato. Jugadores que rindieron sobre las expectativas, oportunidades para canteranos y un proyecto que sienta bases desde lo económico.

Nombres como los de Carlos González y Felipe Mora hicieron olvidar por completo a Nicolás Castillo con 18 goles repartidos en partes iguales. El paraguayo fue, sin dudas, el fichaje de la temporada.

En cuanto a la cantera, dos figuras brillaron por encima del resto: Alan Mozo y Andrés Iniestra. Con 21 y 22 años, respectivamente, Pumas ganó par de figuras que pueden ser parte de la columna vertebral del equipo.

Otra de las notas altas es la solidez económica que va presentando el equipo. Si bien se viven tiempos de austeridad, los auriazules viven una nueva realidad en la que el presupuesto no es impedimento para competir.